MIEDO: (Del lat. metus)
1.m Perturbación angustiosa del ánimo por un riesgo o daño real o imaginario.
¿Cuantas veces no nos hemos sentido inútiles? ¿Cuantas veces, por miedo a equivocarnos, no hemos dado el paso? ¿Es así como debemos sentirnos?
Seguramente que alguna vez en tu vida te has preguntado alguna de estas cuestiones. Y es que, la mayoría de nuestras acciones, que en un futuro podrían ser totalmente virtuosas, no las hacemos por MIEDO. Vivimos con constante inseguridad hacia el futuro. Esa es nuestra barrera hacia cualquier tipo de decisiones.
Afrontemos ese duro handicap. Podemos conseguir cualquier cosa si nos desprendemos de esa sensación. Las cosas podrían ir mejor.
RABIA: (Del lat. rabies)
3.f Ira, enojo, enfado grande.
La RABIA aparece cuando menos te lo esperas. Es una sensación angustiosa, furiosa, devastadora. Son ganas de acabar con todo y por todo. Descontrol.
Normalmente, esta emoción surge después de las malas consecuencias de algún acto que hayas hecho y no haya salido como tu te esperabas. Podrás romperlo todo, decir crueles palabras, hacer daño... pero nunca conseguirás nada. Quedará todo devastado, pero tu seguirás ahí, con los ojos rojos y con las manos temblando.
Respira profundamente, cuenta hasta tres y deja que todo fluya. Después de la tormenta siempre viene la calma.
TRISTEZA: (Del lat. tristis)
1.adj Afligido, apesadumbrado.
2.adj De carácter o genio melancólico.
Y llegamos al súmmum de las emociones. Esas ganas de llorar, de dejarlo ir, de acabar con todo acaban llevándote a la TRISTEZA. Caes en un pozo oscuro, difícil de salir airoso.
En ese pozo, sólo ves sombras oscuras, que se alargan cada vez más y te dan miedo. Alli dentro, oyes extraños ruidos, que no sabes de donde proceden, pero los oyes.
Al final, una cuerda caerá dentro de ese pozo, y podrás trepar y salir de allí. No volverás a ese lúgubre lugar, por lo menos por un tiempo.
Todo va a salir bien, te lo prometo.
Noe. (storytellerZ)
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