jueves, 14 de mayo de 2015

La Estanquera de Saigón






"Soy el rap que escucharía Ho Chi Min en la jungla, el manifestante antiguerra que duerme en comisaría, el estudiante que se hace preguntas, el beligerante amor libre, soy el hippy puesto de maría.

Soy el espía soviético de la Guerra Fría, la voz del pueblo en movimiento. Soy la virtud que busca Dilan en el viento, soy la juventud quemando la cartilla de reclutamiento. Soy el black panter violento, ¡compromiso! soy Angela Davis llamando machista a Nixon. Soy el insumiso. Yo Kubrik, tú Melendi, la verdad no es otra cosa que un solo de Jimi Hendrix. Soy Janis Joplin puesto hasta las cejas de LSD en tu cabeza, el tímido del baile. Soy la bala que atraviesa la nuca de Kennedy, soy la chupa de Peter Fonda en Easy Rider. Soy el fraile guerrillero, el mayo perdido, el obrero de la Renault traicionado por el partido.

Soy el manifestante herido, el último maqui, el Vietcong ejecutando al granjero de Kentucky que muere gratis y a una edad temprana. Soy siete balas contra Melitón Manzanas. Soy puta, soy fulana, soy marica, soy negra, soy el que se sacrifica, el que sirve, la que friega. Soy la clase obrera lista para la reyerta, la estanquera de Saigón no compra en Zara. Soy Guevara en Bolivia, que no se esconde gritando ¡dispara cobarde, sólo vas a matar a un hombre!

No más muerte. Ninguna agresión racista. Ahora grita, cabrón: ¡La estanquera de Saigón! No más muerte. Ninguna agresión imperialista. Ahora grita, cabrón: ¡La estanquera de Saigón!

Soy el rap que escucharía Camilo en Sierra Maestra, un guerrillero, un guerrero del Vietcong. La sensación, la nueva canción protesta, Fidel entrando como un héroe en el barrio del Bronx. Soy la maestra represaliada por Franco, el nieto de quien no pudisteis matar, el hijo de quien no pudiestes callar, soy cien kilos de amonal bajo Carrero Blanco. Lee Harvey os fue matando a la gran mentira, soy Rosa Parks gritando ¡basta! ¡basta! desde primera fila, soy Yuri Gagarin desde el exterior diciendo no veo ningún dios por aquí arriba.

Soy la bala perdida que mata al Marine, Jean-Luc Godard en Cannes colgado de la pantalla de cine.

En mayo del 68 y bajo adoquines no hubo arena de playa sí esperanza que aún pervive. Soy el pibe que suena en vinilo, suena en cinta un grupo salvaje como el de Sam Peckinpah. Tú tan Primavera Sound, yo Otoño Alemán, soy la perfección, como el principio de Sed de mal.
Y no, no soy el cubano gusano que interpreta en Scarface Al Pacino. Yo soy el cubano armado que apunta y dispara al yankee en Bahía de Cochinos. Soy el clandestino, el fugitivo, el sinpapeles, soy la clase obrera antisistema, soy la plebe, soy el que conmueve, soy El Sucio, soy Mejías que levanta el puño como Jane Fonda en comisaría. Soy la rebeldía, el pueblo, la mayoría, soy la guerra fría, el enemigo de la CIA soy la valentía del chileno consecuente gritando ¡Allende, el pueblo te defiende!.

No más muerte. Ninguna agresión racista. Ahora grita, cabrón: ¡La estanquera de Saigón! No más muerte. Ninguna agresión imperialista. Ahora grita, cabrón: ¡La estanquera de Saigón!"

NoeStoryTellerZ

domingo, 10 de mayo de 2015

GREEN VALLEY: Plantando una semilla positiva


                                                     "Me gusta ver la vida pasar, 
me gusta verla contigo. 

Quisiera ser tu bastón al caminar   

y al despertarme tu abrigo."

                                        


La crónica de un concierto: Green Valley 

Es impresionante cómo este grupo transmitió tanto optimismo y buen rollo en una pequeña sala de conciertos de la zona de Girona. 
Los músicos ya estaban tocando la intro cuando, de fondo y sin poder verlo, la voz del vocalista hacía vibrar a las masas. Seguidamente, Valverde sale al escenario y nos deslumbra a todos. Su brillante voz nos agarra, quedándonos prendados de sus mensajes. Todos estábamos ahí, escuchando cada acorde, cada letra, cada movimiento, cada destello de luz que desprendía. 
Nos tranquilizaba. Toda la sala estaba llena de sonrisas, pero la más bonita y la que hacía que todos sonriéramos era la de Valverde. Qué técnica, qué manera de hacernos sentir bien. Hacía que estuviéramos contentos, que olvidáramos los malos momentos por un rato, que escucháramos la música y que bailáramos con muchas ganas. Sus ojos lo decían todo.
Y llegó el momento más esperado: sonó Love, love. Valverde nos pidió que nos abrazáramos todos... y eso hicimos. Sin conocernos de nada todos nos abrazamos y cantamos aquella canción a pleno pulmón. Fue emocionante.
Otro minuto de oro fue con Si no te tengo. Ahí, todos los que llevábamos mecheros o luces semejantes las encendimos, y todo el lugar quedó a oscuras, con las lucecitas de cada uno y la canción. Sólo y nada más. 
también nos enamoramos con la canción Los Sueños, en la que volamoss hacía otro mundo.
Toda esta experiencia va acompañada de intensos bailes, risas, humo, cerveza, sentimientos, sensaciones, libertad, desconexión, evasión... pero sobretodo, felicidad.

        
NoeStoryTellerZ



miércoles, 6 de mayo de 2015

¿ UN PAÍS DE PROPIETARIOS O QUIZÁS DE DESAHUCIADOS?

Hola hoy me gustaría hablaros de un tema muy importante actualmente en nuestro país y que la gente no le da la importancia que se merece. Os quiero hablar de los DESAHUCIOS, si buscamos en el diccionario la definición de desahucio que encontramos es:

  1. Desahuciar:(De des- y ahuciar):  Dicho de un dueño o de un arrendador: Despedir al inquilino o arrendatario mediante una acción legal. 

Para mi es más que eso, desahuciar es dejar a familias enteras en la calle, arrebatarles cualquier dignidad o esperanza, dejándolos en la calle, sin nada con niños, bebes, personas mayores...

El dolor psicológico que sufre la familia nadie lo entiende, solo vemos en la tele como unos policías echan a familias enteras de sus casas, porque no la pagan.  ¿Pero a ver quién quiere vivir sin pagar su casa?¿ A quién le gusta? Es la decisión más dura que una persona tiene que tomar en su vida, imaginadlo sólo por un momento, que sentirías si tuvieras que elegir entre comer o pagar la casa.

Ese momento en que ya no hay esperanzas, ni opciones, dejar de pagar TÚ casa es el último recurso, cuando ya se te han cerrado todas las puertas. Ha habido padres de familia que no pudiendo superarlo se han suicidado dejando así hijos, mujeres, hermanas, madres que sufren.
 Lo que os quiero decir es que nadie deja de pagar la casa porque quiera, NADIE.

Estas cosas tienen consecuencias terribles para las familias, aparte del rechazo social que estas sufren, el sentirse señalado. Donde huyes con hijos,  traumatizarlos sacándoles de sus escuelas, amigos, hacia un sitio donde no te sientas señalado y simplemente poder empezar de nuevo.

Elegir entre comer o pagar la casa, ¿ Qué decisión tan difícil verdad? Pues lo es, realmente lo es, conozco casos en los que la gente ya no puede dormir tranquila, por miedo a que les toquen la puerta de madrugada y les saquen a la calle, vivir con miedo en tu propia casa que se supone que es tu lugar seguro en el mundo: Hogar, dulce, hogar  que pasa cuando ese hogar deja de ser dulce y se vuelve amargo.

Con todo esto solo quiero decir que ya es bastante difícil tener que elegir entre cosas tan básicas como para que además se tenga que lidiar con el rechazo social, todos debemos a aprender a ser más comprensivos y antes de abrir la boca saber que decimos.


Atentamente una ciudadana indignada.

lunes, 4 de mayo de 2015

¿Para qué?


Para qué nacer, si vamos a morir. Para qué seguir, si vivimos retrocediendo. Para qué hablar, si las palabras se las lleva el viento. Para qué sentir, si los sentimientos nos los rompen. Para qué conocer, si se está mejor solo. Para qué estudiar, para ser un cadáver culto. Para qué el dinero, si ya están los bancos, que nos lo roban. Para qué comportarnos, si somos animales. Para qué crear, si lo acabamos destruyendo. Para qué imaginar, si nada sale bien. Para qué disfrutar, si lo bueno dura poco. Para qué alimentarnos, si acabamos ayunando para vernos mejor. Para qué vestirnos, si nos crearon desnudos. Para qué maquillarnos, si nos destroza la cara. Para qué escuchar, si no sabemos hacerlo.  Para qué convivir, si somos egoístas por naturaleza. 
¿Y para qué? Para absolutamente nada.

(NoeStoryTellerZ